Para mí no es una frase feliz. Entiendo que es la apreciación del Presidente, pero nosotros podemos tener algunas diferencias”.

Boris Barrera

Diputado PC

Los familiares de las víctimas y el movimiento de derechos humanos sabemos muy bien la fórmula de que significó en ‘la medida de lo posible'”.

Carmen Hertz

Diputada PC

Las palabras del Presidente son inaceptables, la tristemente célebre frase ‘en la medida de lo posible' está marcada por la protección de genocidas y la perpetuidad de la impunidad”.

Lorena Pizarro

Diputada PC

“Lo posible es por lo que hay que dejar todo nuestro esfuerzo, todo nuestro empeño, es lo que se define colectivamente, no es el desgano, como algunos, malamente, pudimos haberlo interpretado”, dijo el Presidente Gabriel Boric durante la inauguración de la estatua del exmandatario Patricio Aylwin el pasado miércoles. Sus palabras fueron seguidas por un centenar de dirigentes y excolaboradores de Aylwin quienes destacaron la alusión del mandatario a la frase “en la medida de lo posible”.

En 2016, año de la muerte de Aylwin, Boric siendo diputado había escrito una columna de The Clinic en la que lo calificaba de “personaje contradictorio” en alusión a que había apoyado el golpe de Estado y luego fue un actor de la recuperación de la democracia.

En la coalición de Gobierno las palabras del jueves del mandatario no dejaron a todos conformes.

Con el paso de las horas, en la bancada del Partido Comunista comenzaron a hacer públicos sus reparos. La primera dirigenta fue la diputada Lorena Pizarro, expresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, quien al recordar a su madre indicó: “Las palabras del Presidente son inaceptables, la tristemente célebre frase ‘en la medida de lo posible' está marcada por la protección de genocidas y la perpetuidad de la impunidad. Ni la justicia ni la vida pueden ser, bajo ningun punto de vista, ‘en la medida de lo posible'”, dijo la legisladora.

En el acto del miércoles por la mañana no se dejaron ver dirigentes del PC. Solo la ministra Camila Vallejo estuvo en la actividad. Ese día los principales dirigentes de ese partido no emitieron comentarios de la actividad, pero durante la jornada del jueves se pudieron ver más declaraciones.

Carmen Hertz, diputada de la bancada comunista dedicó un par de tuits para discrepar con la valoración que Boric le dio a la frase de en la medida de lo posible.

“Los familiares de las víctimas y el movimiento de derechos humanos sabemos muy bien la fórmula de lo que significó en ‘la medida de lo posible', pretender reinterpretarla no borrará el camino lleno de obstáculos, azaroso y difícil que recorrimos en búsqueda de justicia, memoria y garantías de no repetición, soportes ineludibles en la reconstrucción moral de nuestra sociedad. Precisamente los pactos tácitos de impunidad de la transición limitaron la plena vigencia del Estado de Derecho y la intervención del poder político”.

La diputada Nathalie Castillo coincidió con las declaraciones de Hertz y Pizarro. “Teniendo como contexto los hechos sucedidos posterior al retorno de la democracia es posible interpretar que la frase significó y significa impunidad a las graves violaciones a los derechos humanos ocurridos en dictadura”.

La legisladora añadió: “La frase en la ‘medida de lo posible' es peligrosa, y si no cambiamos nuestra historia esta se vuelve a repetir, aún no sanamos las heridas que dejó la dictadura, con dificultades hemos comenzado un nuevo proceso para las víctimas de la revuelta del 2019. Por ello nuestro gobierno debe hacer todo lo posible para que haya verdad, justicia, y garantías de no repetición y no dudamos es más sabemos que va en esa línea”.

El jefe de bancada del PC, Boris Barrera, dijo ayer que la frase en la medida de lo posible no solo se ciñe al ámbito de los derechos humanos puesto que en ese momento habían muchas “expectativas”.

“Cuando llegó la democracia esa democracia no llegó completamente, sino que en la medida de lo posible y eso se ha visto perpetuado en el tiempo. Fueron muchos gobiernos que avanzaron en la medida de lo posible (...) hay civiles y militares que siguen viviendo como si no hubiera pasado. Para mí no es una frase feliz. Entiendo que es la apreciación del Presidente, pero nosotros podemos tener algunas diferencias y en este caso la medida de lo posible no fue lo mejor si lo miramos desde el punto de vista de los derechos humanos”.

El diputado Luis Cuello añadió: “(La frase) favoreció la impunidad, pues significó una barrera que apuntaba a conformarse con la verdad de los crímenes, pero renunciando a la justicia. La tardanza de la acción de la justicia, la total impunidad de Pinochet, que incluso fue senador vitalicio y murió sin castigo alguno, se explica en esa fórmula”.

La analista política Marta Lagos analizó una de las frases del mandatario cuando resaltó la unión generacional de “Cariola, Vallejo, Jackson y Boric” —compañeros de generación mas no de militancia— y que esperaba que se les recordara como a Aylwin, Frei, Leighton, Tomic y Fuentealba, quienes formaron la DC.

“La dispersión nos muestra la poca validez que tienen hoy los partidos y la importancia que tienen las personas. Los partidos poco valen hoy y son los liderazgos de las personas los que valen”, dijo la analista.

Estatua

Del exgobernante fue inaugurada el miércoles en el frontis de La Moneda frente a la Alameda.

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Desde el Gobierno intentan replicar la jornada de reuniones que encabezó el Presidente Gabriel Boric con los partidos políticos y con los respectivos delegados presidenciales.

Los llamados cónclaves regionales se llevarán a cabo este fin de semana en las regiones de Arica, Tarapacá, Antofagasta, Valparaíso, O'Higgins, Maule, Biobío, Los Ríos y Aysén.

Un documento elaborado desde el Ministerio del Interior que encabeza Carolina Tohá da a conocer los principales ejes que intentarán plasmar los delegados junto a los representantes de los partidos políticos a nivel regional.

“La diversidad que nos constituye no es una señal de debilidad, como algunos pretenden pensar. Es, por el contrario, la condición del éxito de este gobierno. Nos une un programa que cuestiona los abusos, que construye un Chile más justo, que busca el diálogo y avanzar en las urgencias y necesidades de las personas y sus familias”, señala uno de los puntos que intentará remarcar el Ejecutivo durante las jornadas de reflexión.

El segundo aspecto que intentarán reforzar desde el Gobierno será el mandato que dio el Presidente Boric a los distintos delegados en la jornada de reflexión del pasado 4 de noviembre.

“El Presidente nos encomendó la tarea de replicar esa instancia a nivel regional, con el objetivo de poner el foco en las urgencias de las personas y de nuestra región, y de construir la unidad política necesaria de nuestra alianza para lograr responder a ese cometido”, dice el texto que se maneja entre los delegados presidenciales.

Por último, el documento dice que “la principal tarea de los equipos regionales es agilizar el despliegue en los territorios, tanto para levantar las necesidades de las personas como también para comunicar y difundir iniciativas esenciales del Ejecutivo, como la reforma previsional y la reciente aprobación del Presupuesto 2023, que se sustenta en 3 ejes: seguridad pública, seguridad social y seguridad económica”.

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¿Se moderó el Gobierno? No. Lo que se moderó es el país. El discurso de marzo hoy se hace insostenible en el Chile actual. Y el discurso del jueves en la plaza de la Ciudadanía, en marzo era insostenible.

El Presidente Boric inauguró el monumento al expresidente Aylwin llenándolo de elogios. El mismo que se opuso férreamente a Salvador Allende. El mismo que apoyó decididamente el golpe de Estado. El mismo que encarna la esencia de los denostados 30 años. El autor de aquella frase de “la medida de lo posible”.

Ahí estaba el Presidente Boric encarnando el acto republicano.

En buena hora.

Pero es imposible entender su discurso, que lo enarbola como una especie de guía espiritual, después de lo que ha sido su propia trayectoria. Dicho en simple: “Las Cariola, los Jackson, las Vallejos y los Boric” (parafraseando al propio presidente) surgieron a la vida política como reacción a lo que encarna Aylwin.

Y así lo hicieron hasta hace pocos meses. Hasta antes de ayer.

¿No había alternativa para inaugurar el monumento?

Paradójicamente, al propio Aylwin le tocó como presidente realizar el funeral de Estado de Salvador Allende. Y el tono fue muy distinto: “Fui decidido opositor y si se dieran las circunstancias, volvería a ser decidido opositor”, dijo categóricamente. No buscó enarbolar a Salvador Allende en una guía ni un ejemplo, sino que simplemente cumplió con un rito republicano y con presentarlo a la historia como merece un expresidente. Punto.

Tal vez lo visto el jueves en la Plaza de la Constitución explica buena parte de lo que está ocurriendo actualmente.

Es un hecho: el Gobierno de hoy no tiene nada que ver con el Gobierno de marzo. No solo se ha esfumado su popularidad, sino que se ha evaporado su radicalidad. La moderación, que estaba circunscrita inicialmente casi exclusivamente a Mario Marcel, hoy se ha trasladado al Ministerio del Interior, a la Segpres y —lo más importante— al propio Presidente Boric.

Hoy, en el discurso y en las acciones, es otro Boric. Ya no quiere refundar Carabineros, ahora acepta el TPP11, los estados de excepción no eran la criminalización del pueblo mapuche, ahora la inmigración hay que controlarla, existe terrorismo en La Araucanía, los retiros son nocivos para la economía y un larguísimo etcétera.

Un cambio radical en menos de un año. Tan sorpresivo como si hubiera ganado José Antonio Kast y estuviera impulsando el aborto libre, la agenda de género y elogiando a la Unidad Popular.

Algo no cuadra. Alguna partitura fue cambiada. Alguna cinta se puso para el otro lado.

Y la respuesta está en los duros hechos. “Yo conozco al pueblo: cambia en un día”, dijo alguna vez Voltaire. Y no hay nada más cierto. Así lo muestra la historia una y otra vez.

Y vaya que cambió en Chile. Casi en un día.

¿Se moderó el Gobierno?

No. Lo que se moderó es el país.

El discurso de marzo hoy se hace insostenible en el Chile actual. Y el discurso del jueves en la Plaza de la Ciudadanía, en marzo era insostenible.

Pero en política ficción vale la pena preguntarse cuál sería la actuación del Gobierno si hubiera ganado el Apruebo. ¿Moderada? Probablemente no. Probablemente sería refundacional.

Hoy la moderación ha sido impuesta por los hechos. Y en buena hora. La moderación no es sexy. No lo ha sido nunca. Pero resaltarla resulta esencial para evitar que fenómenos políticos como la polarización terminen siendo las expresiones dominantes.

Pese a todo hay que ser justos: Gabriel Boric siempre ha tenido dos almas: una moderada y una refundacional. De ambas ha dado prueba. Es tal vez la muestra más palpable de una condición que todos los seres humanos tenemos. Estamos llenos de contradicciones. Nos gusta comer mucho, pero ser flacos. Levantarnos tarde, pero ganar dinero.

Boric, como casi todos, también está lleno de contradicciones. Pero esa alma de Boric de moderación no está presente en gran parte de Apruebo Dignidad, cuya alma solitaria es revolucionaria.

Pero la pregunta de fondo es cuán creíble es la moderación del actual del Gobierno. ¿Cuánto durará? ¿Es simplemente un fenómeno para ganar tiempo y sortear el temporal? Y si eso no es así, ¿en qué momento aparecerán los autoflagelantes del oficialismo?

Mal que mal, como vamos, este se transformará en el segundo gobierno de la Nueva Mayoría. Y es imposible no olvidar que la Nueva Mayoría es parte de los 30 años. Es parte de la medida de lo posible. Es parte de lo que esta generación había venido a dejar atrás.

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